A diez venías, a cien te vas
Y te cazaste a vos mismo,
Sin dejarte atrapar
Te diste cuenta, te diste vuelta
Que el ojo del sol, no buscaba alumbrar
Tu flecha encendida te impone pelear
Obedeciendo tus poros
Te puso a respirar
Tu armadura hace más de la cuenta
No! en este viaje, no puede abandonar
Genes de un cuero para desplegar
Aires que forman vientos
Imaginaste dejar
Tristes decían, que vos no te arreglaste
Magia es la noche, no vas a deletrear
Tu espalda dice, que nunca volverás
Tu instinto es de humo
No lo vas a frenar
Te diste cuenta, te cerraron la puerta
Tu ojo de furia, te quiere ver brillar
Y te cazaste a vos mismo,
Sin dejarte atrapar
Te diste cuenta, te diste vuelta
Que el ojo del sol, no buscaba alumbrar
Tu flecha encendida te impone pelear
Obedeciendo tus poros
Te puso a respirar
Tu armadura hace más de la cuenta
No! en este viaje, no puede abandonar
Genes de un cuero para desplegar
Aires que forman vientos
Imaginaste dejar
Tristes decían, que vos no te arreglaste
Magia es la noche, no vas a deletrear
Tu espalda dice, que nunca volverás
Tu instinto es de humo
No lo vas a frenar
Te diste cuenta, te cerraron la puerta
Tu ojo de furia, te quiere ver brillar
1 comentario:
Como siempre, como nunca, lo cual es siempre, tus poemas tienen palabras tuyas... Como siempre, sin palabras...
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